El nuevo técnico del Barcelona es de armas tomar. Tiene carácter y sobre todo las cosas muy claras. El holandés está sufriendo las consecuencias de la mala gestión tanto en sueldos como en fichajes.
Nada más llegar, Koeman tuvo que decirle a más de uno que no contaba con él como son los casos de Suárez o Vidal. Una vez hizo esto, ha hecho sus peticiones a la directiva y aquí llegó el problema.
Koeman, como primer fichaje, pidió a Giorgino Wijnaldum, el centrocampista del Liverpool tasado en 17 millones. Cuando la directiva leyó esta petición se negó anteponiendo sus preferencias o lo que es lo mismo, querían fichar antes al ex barcelonista Thiago Alcántara.
Koeman pedía, así, más músculo mientras que el club quería más juego y control de balón. Ésa es la historia de la que fue la primera bronca de Koeman con los mandatarios de su club. Habrá más…