Lucho no cambia y se augura en París una bronca asegurada entre él y el resto del vestuario o al menos con Mbappè y sus acólitos. A Luis Enrique no le vale que Kylian meta goles y que su equipo gane, quiere más rendimiento y mejor juego.

Mbappè está molesto con su entrenador porque ve como ha llegado un entrenador, al que no respeta, y que le exige más de lo que él considera. Luis Enrique con su comportamiento pretende sacar lo mejor de Mbappè pero quizás se está equivocando.

Esto ni favorece al entrenador ni al club porque podría precipitar la decisión de Mbappè de seguir o macharse del PSG. Luis Enrique podría estar haciéndole un favor al Real Madrid, su gran rival.

El asturiano no soporta que Mbappè se pueda marchar al Madrid. Tiene sospechas de que la razón de su bajo rendimiento sea su salida…