No todo va a ser fútbol y deporte. Es lo que debe pensar el polifacético Sergio Ramos al que después de entrenar en casa durante el férreo confinamiento del COVID 19 le sobraba tiempo para dedicarse a otra de sus pasiones: la música.

El madridista es amante de los caballos, la moda, el flamenco y el arte moderno. Poco a poco ha ido adquiriendo una buena colección de pinturas modernas. Sergio es una persona sensible para cualquier modalidad del arte.

Su última demostración ha sido animarse a tocar el piano. El futbolista está especialmente ilusionado con aprender a tocar uno de los instrumentos más difíciles. Ya le hemos visto en alguna ocasión tocar la guitarra española y ahora va a por el piano.

Ramos tiene mucho arte… o no.