Que el futbolista malagueño no es una persona fácil es conocido por todos pero no sabemos hasta qué punto es retorcido.
Nunca se ha puesto límites en cuanto a críticas a compañeros, importándole bien poco las apariencias. Desde que llegó al vestuario blanco, sus relaciones con los demás nunca fueron fáciles.
Isco tiene pocos amigos en el vestuario y su estatus actual con la mayoría es de ruptura. No sigue los mandatos de nadie, ni de los capitanes ni de los entrenadores. Ajustició a Solari en el vestuario y muchos de sus compañeros se lo reprocharon.
El malagueño días después fue la diana de las críticas de Solari por su ingratitud y falta de actitud. Todo esto ha terminado a día de hoy en una relación fría entre Sergio Ramos e Isco. La muestra es que el malagueño estaba invitado a la famosa boda del futbolista con Pilar Rubio y no fue porque no quiso. Isco ‘pasa’ del personal sin respetar los galones…