Zidane y su vida contemplativa
El crack del fútbol no se complica la vida. Disfrutada de su fortuna con toda la tranquilidad del mundo entre Madrid, Ibiza y Marsella. Es un fijo siempre en las apuestas para entrenar a cualquier grande pero de momento su vuelta sigue siendo un enigma.
Se puede ver a Zidane por Madrid, en su barrio del lujoso y caro Parque de Conde de Orgaz, se mueve en un Tesla de los grandes y siempre va rodeado de amigos y familiares. Zizou montó un negocio de instalaciones de Pádel en Marsella, deporte que le fascina y que practica casi a diario.
Pero ¿a qué se dedica el francés? Viaja por placer con su mujer Veronique y cuando está en Madrid se dedica a sus hijos y a su carrera futbolística, sobre todo a la de su hijo pequeño Elyaz.
Zidane que ha tenido a todos sus hijos en el Real Madrid, ha intentado impulsarles. Todos han tenido que dejar el club blanco según han ido haciendo años quizás porque no heredaron su talento. Uno juega en el Betis buscando minutos, otro en el Rayo, otro en Francia… todos disfrutan del fútbol y sin preocupaciones.
Zidane no pretende, de momento, volver a entrenar porque es de los que elige y prefiere no estar en un banquillo a coger un proyecto perdedor quizás por aquello de que nada tiene que ganar y mucho prestigio tiene por perder.
De volver, volverá al fútbol para entrenar a la selección francesa cuando Dechamps se vaya o volverá al Madrid pero parece que Ancelotti es inamovible como poco hasta 2026. Zizou vive la vida en silencio y a su manera.