El futbolista del Milan celebró por todo lo alto sus 40 primaveras, lo hizo a base de despilfarros. Para empezar hizo una fiesta de esas que no se olvidan nunca. Allí estuvieron, entre otros, sus amigos Pogba, Verratti, Donnarumma o Cassano.

El fiestón en cuestión se celebró en el mítico Hotel Hyatt Centric de Milan. En la fachada del edificio se proyectó un número '40' enorme con juegos de luces. Como es de imaginar el ambiente en la fiesta fue inmejorable con todo tipo de invitados y personajes. 

Zlatan es un tío peculiar que nunca pasa desapercibido. Por cierto, el sueco se hizo un autorregalo: un Ferrari SF90 Stradale descapotable de color dorado, ¡sí dorado! 

Ibra es genio y figura. El día que se retire le vamos a echar mucho de menos…