En el Atleti ni olvidan ni perdonan lo que ha pasado con Antoine Griezmann. El francés se fue al Barça contra viento y marea e incluso ganando menos que en el Atleti, pero esto ya es historia.
La realidad es que ni Enrique Cerezo ni los suyos han digerido la marcha de Griezmann y mucho menos las formas.
En el Atleti consideran que el Barcelona aún le debe dinero y la tensión sigue igual que el primer día. El derbi jugado en el Wanda entre Atleti y Barça dejó claro que las directivas están
muy lejos y no hay relación entre ambas.
Como es tradición en los últimos años, el Atleti hizo la comida prepartido entre directivas en un conocido restaurante a las afueras de Madrid. Al encuentro no fue el presidente del Barcelona, Bartomeu, pero sí fue en su representación Guillermo Amor y algún que otro directivo más.
Amor prácticamente no abrió la boca durante la comida. El que sí la abrió fue Cerezo que nada más empezar a comer reprochó al Barcelona el ‘tema Griezmann’. La conversación subió de nivel e incluso se llegó a hablar de política. Cerezo no se mordió la lengua y uno de los suyos, allí presentes, tuvo que mediar para rebajar la tensión.
Enrique Cerezo no se mordió la lengua. Ni perdona ni olvida…