Durante este verano el equipo parisino estuvo buscando un cuarto delantero ya que no tienen en alta estima a Mauro Icardi y el trío de Mbappè, Neymar y Messi podría llegar a ser insuficiente para alguna posible rotación de Galtier.  

El PSG estuvo a punto de “tocar” a Antoine Griezmann como refuerzo a sabiendas de que Simeone no contaba mucho con él. Leo Messi en cuanto se enteró de las intenciones de su club dio un “no” radical a la llegada del futbolista francés. 

Argumentó que su relación con Griezmann no es buena desde que ambos coincidieran en el Barcelona. Griezmann durante su temporada nefasta en Can Barça acusó a Leo Messi de hacerle vació y no integrarle en la plantilla. Era uno de los no invitados de la plantilla a los asados que hacía Messi en su casa. 

Tan mala fue la relación que hasta Godín, el uruguayo del Atco. de Madrid, tuvo que intermediar con Messi para que mejorara la relación entre Leo y Antoine. Leo ni olvida ni perdona, ha hecho todo lo posible para que Griezmann no termine en el PSG.