Hazard, aunque está teniendo un inicio de temporada complicado, es feliz y se siente querido por Zidane y por sus compañeros.
El belga tiene ya su propia pandilla de amigos en el vestuario. Era de esperar, ha hecho piña con sus compañeros que hablan su mismo idioma, el francés.
Aunque tiene buena relación con todos, su grupo de confianza son Thibaut Courtois, compañero de la selección belga, y los francófonos Mandy, Varane y Benzema.
Resulta curiosa su gran relación con Gareth Bale, un futbolista que nunca ha destacado por tener grandes amistades en el vestuario blanco. Hazard y Bale hablan en inglés, como no podría ser de otra manera.
Hazard ya tiene la presión en su cabeza: tiene que demostrar ya quien es dentro del campo.