El futbolista del Madrid está adaptado a la perfección a Madrid y al vestuario de su nuevo club, un club al que ha llegado para estar muchos años. Sus compañeros están encantados con él y en poco tiempo se ha convertido en la ilusión de la afición.

Jude está de dulce. Es un chico sociable, nada problemático y sobre todo muy disfrutón. Le gusta disfrutar de la vida y tiene una pasión muy cara pero puede permitírselo. Son los coches y el garaje que tiene en casa no es precisamente barato.

Se le ha visto llegar a entrenar en taxi en más de una ocasión pero no será por falta de vehículos. Uno de sus tesoros es un Bentley Continental GT que goza de un motor V8 y que se pone de 0 a 100 kilómetros por hora en solo 3,6 segundos. Por si esto fuera poco, el crack madridista tiene, como no podía ser de otra manera, un Ferrari 488 Pista y un Porsche 911.

A Bellingham no solo le gustan los súperdeportivos, también tiene algún suv en casa como el Lamborghini Urus y un Clase E de Mercedes.